Señor, cuántas veceshas venido a mi encuentroy te he ignoradocon cualquier escusa,indiferente o ensimismado.He palpado tus llagasy no supe darte alivio.Perdóname, Señor,por todos las renuencias,la escusas, los olvidos.Vi tu rostro en los días,y en la hora de la muerte,pero, ay, no supe reconocerlo.Me...
Señor, cuántas veces
