TENTATIVA DE ACUARELA

Quisiera describir con tintes lúcidos estos versos,
sostenerme en la gramática del deseo,
horadar con el lápiz afilado los cielos de la ilusión.
Viejos cielos de azulina sobre los que prendían
rechonchas nubes de algodón en las tiesas cartulinas
coloreadas del ensueño enternecido de la infancia.
Aquello debería haber sido un indicio de que habría un algo más,
una premonición, un cántico,
un juego celeste que justificara esa espuma de la vida
que se desvanece en la arena
al continuo beso mortal del mar.
Mar azul de intensa acuarela,
que buscaba entre sus gamas un idilio de marina,
un paraíso que se sabía perdido
y que solo recobraba el arrebato desfogado del ensueño.
Sí, quisiera que mis versos fueran claros
a la hora de decirme, a la hora de encontrar
ese epicentro fugitivo, ese omphalos que se hurta
buscando el abecedario callado
que al deletrearlo descifra la palabra Dios.
Compartir en Google Plus

Francisco Juliá

Soy Francisco Juliá, y el deseo de este blog es llegar al mayor número de lectores, compartir una hermandad a la que nos invita lo íntimo de la conciencia.

  • Image
  • Image
  • Image
  • Image
  • Image

0 comentarios:

Publicar un comentario